Me veo en el coche amitad de cada noche buscando algo que evidentemente no quiero encontrar, me muero las uñas de la necesidad de salir corriendo y me tropiezo siempre con los mismos pies torpes de escapes fallidos. La amo cada noche y cada día, y me llama entre sueños la voz de correr por más, siempre pensando que no importa la verdad mientras lo "verdadero" no se ponga en riesgo. Y ahi voy, lanzando humos y viendome a los espejos que me coloco delante, es increible reconocerme en una imágen que me fascina, como cambiante desafio de toda una vida amorfa y sin aesthesis de por medio (o por lo menos eso pensaba al huir de ellos a cada oportunidad). En realidad siempre quise que me sucediera esto, pero no se si quiero pagar el precio por ello, creo que si lo sé, NO QUIERO!
Me duele dolerle, y me lastima no buscarme en donde "debo", y al mismo tiempo me urge el instinto, me avienta la pinche emocion a probar todo lo nuevo, todo lo que me he perdido, todo lo que quiero comerme a mordidas y todo lo que siempre he querido sentir...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario